Ni diez minutos del partido en Avellaneda habían transcurrido cuando, en Parque Patricios, Huracán logró empatarle a Boca ya en tiempo de descuento. Resultado que le daba a San Lorenzo la chance de achicar la diferencia con el puntero del torneo de Primera División. De hecho, el equipo de Diego Aguirre asumió el protagonismo en el Cilindro, tuvo la llegada más clara con un penal en movimiento de Cerutti que atajó Musso, volvió a aproximarse con peligro por otro centro de Merlini y un cabezazo alto de Blandi, pero sobre el final de esa primera parte se complicó el panorama por la expulsión de Rojas.
Ya en el segundo tiempo, de movida, Racing aprovechó una distracción dentro del área del Ciclón y Rosales, atento, con un puntazo puso el 1-0 para el local. Pero, una vez más, el Santo sacó a relucir su orgullo y no sólo eso: con buen toque, fue creciendo de a poco y llegó al empate por una apilada de Cerutti, pecho y asistencia de Belluschi y gol de Blandi. Pero en el mejor momento cuervo, Acuña se encontró con una pelota boyando dentro del área y con un zurdazo inapelable selló el 2-1 para la Academia.
Ahora, San Lorenzo quedó a siete puntos de Boca, en el quinto escalón de la tabla, y en la próxima fecha recibirá a River, con la intención de sumar de a tres para acomodarse en los puestos de Copa Libertadores y, por qué no, volver a ilusionarse con la lucha por el título. Vamos, ¡no afloje, Ciclón!