A diferencia de los partidos anteriores, con resultados adversos, el Ciclón mostró otra cara y estuve cerca de dar el golpe de la jornada ante uno de los candidatos, Boca Juniors.
En Boedo, ante un gran marco de público, el equipo de Emmanuele Quintans disputó un buen partido, estando por delante en el marcador durante varios minutos, incluyendo el primer tiempo 43-39).
Sin embargo, el oficio del rival, sumada a la poca eficacia en los tiros de larga distancia como algunas imperfecciones ofensivas, le dieron el triunfo a los de Gonzalo García por 75-69.
El Ciclón registra ahora tres triunfos tras ocho encuentros, y volverá a jugar el próximo 25 de noviembre como visitante, ante el mismo rival de anoche.