El primer paso de San Lorenzo en la Liga Nacional fue con una sonrisa: goleó 4-0 a Rosario Central en el Cochocho Vargas con goles de Rodríguez -2-, Baisel y Bolo.
En el mundo que gira al sonar de la redonda mucho pasa por la cantidad de recursos que tenga un jugador o un equipo. Y hoy la clave de San Lorenzo pasa por el Gallego Rodríguez: porque tiene eso que tienen los habilidosos y hace delirar a la grada cuando saca a relucir su gambeta. Porque tiene eso que tienen los que crean e inventan, de una galera, un truco nuevo. Y porque también tiene eso que tienen los goleadores y sabe ir a buscar la pelota en el momento y lugar indicados.
Cuando el partido estaba complicado, cerrado, friccionado, Rodríguez armó una jugada por la izquierda y asistió a Baisel, que apareció por el segundo palo en soledad y la empujó para abrir el marcador. Después cambió roles y fue a buscar el rebote de un tiro que parecía perdido y estampó el 2-0. El tercer grito llegaría en los pies de Bolo, que desde afuera del área metió un zurdazo inatajable y estiró la ventaja. Pero eso no sería todo: San Lorenzo tiene en mente ser el mejor primero de los grupos para llegar cómodo a la semifinal y puso arquero-jugador aun con el resultado a favor. Stazzone se calzó la casaca azulgrana y condujo al equipo desde el fondo para que llegara el cuarto tanto otra vez en lo pies del Gallego Rodríguez, que comandó un contragolpe junto a Pablo Vidal y puso el resultado definitivo: 4-0.
Ahora, el equipo conducido por Facundo Ruscica ya pone la mente en su próximo compromiso: mañana, desde las 14, ante Huarpes de San Juan. ¡Vamos, muchachos!El primer paso de San Lorenzo en la Liga Nacional fue con una sonrisa: goleó 4-0 a Rosario Central en el Cochocho Vargas con goles de Rodríguez -2-, Baisel y Bolo.
En el mundo que gira al sonar de la redonda mucho pasa por la cantidad de recursos que tenga un jugador o un equipo. Y hoy la clave de San Lorenzo pasa por el Gallego Rodríguez: porque tiene eso que tienen los habilidosos y hace delirar a la grada cuando saca a relucir su gambeta. Porque tiene eso que tienen los que crean e inventan, de una galera, un truco nuevo. Y porque también tiene eso que tienen los goleadores y sabe ir a buscar la pelota en el momento y lugar indicados.
Cuando el partido estaba complicado, cerrado, friccionado, Rodríguez armó una jugada por la izquierda y asistió a Baisel, que apareció por el segundo palo en soledad y la empujó para abrir el marcador. Después cambió roles y fue a buscar el rebote de un tiro que parecía perdido y estampó el 2-0. El tercer grito llegaría en los pies de Bolo, que desde afuera del área metió un zurdazo inatajable y estiró la ventaja. Pero eso no sería todo: San Lorenzo tiene en mente ser el mejor primero de los grupos para llegar cómodo a la semifinal y puso arquero-jugador aun con el resultado a favor. Stazzone se calzó la casaca azulgrana y condujo al equipo desde el fondo para que llegara el cuarto tanto otra vez en lo pies del Gallego Rodríguez, que comandó un contragolpe junto a Pablo Vidal y puso el resultado definitivo: 4-0.
Ahora, el equipo conducido por Facundo Ruscica ya pone la mente en su próximo compromiso: hoy, desde las 14, ante Huarpes de San Juan. ¡Vamos, muchachos!
Foto gentileza de Natalia Ocarez.