¡Campeones otra vez!

Se sufre, siempre se sufre. Algunas veces más, otras un poco menos, pero todo hincha de San Lorenzo sabe que para poder disfrutar, tiene que pasar por esa sensación. Y quizás esta, para los que siguen al equipo desde hace ya muchos años (con muchas alegrías y títulos de por medio) sabían que este grupo no los va a dejar tirados, y así volvió a ocurrir este sábado por la noche en el Gimnasio Municipal Número 3 de Bariloche, lugar donde los dirigidos por Luciano Antonelli sumaron una nueva Copa a las vitrinas de este glorioso club. 

Con el cambio de formato para la Copa Argentina, aquellos que llegaban a semifinales de la rama Metropolitana debían jugar un Final Four junto a dos equipos del interior. En este caso, el CASLA debió enfrentar a La Esperanza de Bahía Blanca, rival al que venció por 6-0, con los goles de Thomas Baisel por duplicado, Agustín Del Rey, Martín Amans, Gerardo Menzeguez y Tomás Acebedo, llegando así, una vez más a una nueva final. 

La cita era ante 17 de Agosto, el actual puntero del campeonato doméstico y quien había dejado en el camino a La Quema de San Luis por 7-0. Con un Gimnasio Municipal Número 3, colmado de gente y la fuerte presencia de los Cuervos y Cuervas de la Peña de Bariloche, quienes no pararon de apoyar en todo el partido, la final tuvo todos los condimentos necesarios. 

La ventaja la sacó el Ratón a los 10 minutos del primer tiempo. A poco del final, Tomás Bazán lograba llegar al empate pero su tanto era invalidado por una mano al impactar la pelota. De esa manera, 17 de Agosto se fue al descanso 1-0 arriba. En la segunda parte, se vio la mejor versión del conjunto azulgrana, donde fue ampliamente superior y claro dominador del juego. 

Pero nada sería tan sencillo. La pelota no quería entrar, pese a varias ocasiones muy claras a favor del Ciclón. Recién a los 16 minutos, Agustín Del Rey, lograría igualar las acciones, pero dos minutos más tarde, los de Villa Pueyrredón volverían a ponerse por delante. En medio de todo esto, Julián Caamaño no pudo poner el 2-1, tras no convertir de sexta falta. 

Lo mejor vendría a tan solo 20 segundos del final, ya con arquero jugador en cancha. Lucas Bolo remató y tras un desvió, colocó el 2-2, provocando el festejo de todos, los que estaban en Bariloche y aquellos que seguían la transmisión desde diferentes partes del país y el mundo. 

En los penales, la capa de superhéroe fue, una vez más, para Luka Benyik, uno que conoce muy bien estas instancias y que atajó dos penales en la serie, el último para coronar a San Lorenzo como el Bicampeón de la Copa Argentina y llevar el trofeo para Boedo.