Fue un partido emocionante, en el que San Lorenzo tuvo muchas chances para llevarse el triunfo. Lo buscó, fue punzante, se recuperó de un arranque complicado, y al final no pudo quebrar el empate. El Ciclón, que caía 2-0, finalmente dejó la chapa 2-2 frente a Rosario Central, en duelo de punteros, en un Pedro Bidegain con muchísimo público.
Sin hacer demasiado, la visita se puso 2-0 a los 20 minutos del primer tiempo. Primero fue Riaño, de cabeza, a los 11; y nueve minutos más tarde, el que golpeó fue Rius, con una gran definición al segundo palo de Navarro. Un comienzo inesperado, porque el Ciclón había arrinconado a Central en los primeros instantes.
Sin embargo, el equipo de Juan Antonio Pizzi reaccionó rápido. Belluschi, a los 22, metió un estiletazo de zurda, abajo, imposible para Ledesma. Y a los 30, San Lorenzo dispuso de un penal que, al intentar picarlo, Bareiro terminó desperdiciando. Otro golpe duro, sobre todo desde lo anímico. Pero de vuelta apareció la pegada de Belluschi, para enviar un centro que Bruno Pittón peinó con certeza. El Bidegain estalló, con alivio. Partidazo.
El segundo tiempo tuvo una tónica parecida: San Lorenzo atacando, buscando el hueco con pases rápidos, y un Central agazapado, listo para contraatacar. La tuvo Bareiro a los seis, con un cabezazo que se estrelló en un palo. Y el equipo siguió probando, con distintas fórmulas, y con el ingreso del Tanque Díaz y de Oscar Romero, quien finalmente hizo su debut. Sobre el final, el Perrito Barrios (gran figura), disparó al palo, dentro del área. Casi...
No pudo ser, pero los aplausos finales premiaron la labor y las ganas de un equipo que estuvo cerca de llevarse el triunfo.