Tan incesante como el canto de los fieles bajo la lluvia fue la búsqueda en ataque de San Lorenzo. Con mucha gente en campo contrario, con empuje, con centros, con llegadas varias, incluso con un penal ejecutado por Blandi. Pero no pudo ser. El arquero Weverton se hizo gigante ante cada intento azulgrana y, en definitiva, el tempranero gol de cabeza de Lucho González decretó la victoria por 1-0 de Atlético Paranaense en el Nuevo Gasómetro.
Así, el conjunto de Diego Aguirre sumó su segunda caída en dos partido del Grupo 4 de la Copa Libertadores. En la próxima fecha le tocará visitar a la Universidad Católica, el 12 de abril, en Santiago de Chile.